Paisajismo comestible
Te cuento que cuando me encontré con esta expresión «paisajismo comestible» inmediatamente se vinieron a mi mente imágenes de mi jardín. De algunas de las plantas que tengo y que terminan indudablemente formando parte de la cocina.
Seguramente reconocerás alguno de esos arbustos aromáticos como el romero y el laurel, hierbas como el orégano, la menta y el perejil, frutales como el limonero o la vid, y en casos más «atrevidos» hasta una huerta urbana.
Espero que este apartado lo construyamos también juntos, iré incorporando fichas sobre distintas plantas, que nos regalan sus brotes, flores o frutos comestibles.
Ten en cuenta que deberás elegir lugares con una buena cantidad de sol (al menos 6 horas). Si el espacio es una terraza o un balcón, no te desesperes, consigue unas buenas macetas o unas jardineras y allí podrás cultivarlas.
Comparto una idea general de la temática en las notas de paisajismo comestible que escribí para la revista ClubHouse y que puedes leer también en el Diario Los Andes (Mundo ClubHouse).
O si prefieres descargarlas para tenerlas en tu computadora y leerlas cuando desees, accede a las tres notas juntas desde el siguiente enlace: